Hola, somos Mª Teresa, Ariana y Tamara. Bienvenidos a este blog que ha nacido con el ánimo de poder ayudar a todos los que deseen llevar una vida más sana, mediante recetas saludables y sencillas. También añadiremos videos y consejos interesantes. Deseamos que les sirva. Salud y Amor a todos los que pasen por aquí.
viernes, 27 de diciembre de 2013
lunes, 9 de diciembre de 2013
alimentos a evitar
ALIMENTOS GMO (Modificados genéticamente)
Un estudio en 2012 de Francia confirmó los peligros de consumir alimentos genéticamente modificados. Las ratas fueron alimentadas con comida de maíz GMO diariamente durante 2 años y los resultados incluyeron un aumento exponencial en los tumores mamarios, falla renal y necrosis hepática en comparación a las ratas que fueron alimentadas con alimentos naturales.
Ingredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
Ingredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
Ingredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
Ingredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
ngredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
Ingredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
ngredientes
- 1 calabaza mediana
- 4 puñados de espinacas frescas
- ½ cebolla picada
- 2 dientes de ajo molidos
- 300 g arroz integral
- 1 ½ litro de caldo de verduras
- 50 g coquitos de Brasil, molidos
- ½ cucharadita de nuez moscada
- 50 g queso parmesano, o alternativa sin lácteos (opcional)
- 1 vaso de vino blanco ecológico (opcional)
- Una pizca de sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva virgen extra ecológico
- Pipas de calabaza para aderezar
Instrucciones
- Cortar la calabaza a lo largo por la mitad. Hacerle incisiones a 1 cm del borde de las dos mitades, creando una cuadrícula.
- Retirar la pulpa y las semillas y sacar los cubitos de calabaza.
- Colocar las mitades ahuecadas en una bandeja de cristal y rociar con un poquito de aceite. Con el horno precalentado a 200º previamente, hornear durante 20-30 minutos, hasta que estén blandas.
- En una cacerola sofreír la cebolla y el ajo.
- Cuando estén doraditos, añadir la calabaza y freír durante unos 5 minutos, con cuidado de que no se queme.
- Enjuagar el arroz antes de mezclarlo con el resto de ingredientes, para quitar el exceso de almidón.
- Mezclarlo todo y sofreir hasta que los granos de arroz parezcan transparentes.
- Echar el vino y cocer a fuego lento hasta que se evapore.
- Añadir el caldo de verduras, poco a poco, y seguir removiendo el arroz a fuego lento durante 25-30 minutos, hasta que el arroz quede al dente.
- Antes de que se evapore todo el líquido, añadimos 1 o 2 cucharadas más del aceite de oliva (para conseguir la textura deseada), los coquitos de Brasil picados, la nuez moscada, y el queso y salpimentamos al gusto.
- Quitar del fuego.
- Colocar las espinacas encima del arroz y tapar la cacerola hasta que las espinacas se pongan blandas con el calor residual. Quitar la tapa y remover todo.
- Servir el risotto en las mitades de la calabaza y aderezarlo con pipas de calabaza crudas.
Notas
Para seguir una dieta sin lácteos, cambiamos el queso por más
coquitos de Brasil, ya que añaden una textura suave y cremosa y un sabor
fuerte que parecido al de un queso curado ¡además tienen multitud de
vitaminas, minerales y aceites monoinsaturados!
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?
¿Y por qué no experimentáis con otros frutos secos como los anacardos o los piñones?