Los ingredientes
Medio kilo de garbanzos previamente hervidos
Uno o dos dientes de ajos picados
Algunas cucharadas de pasta de sésamo (tahín)
Aceite de oliva
zumo de limón
Comino
pimienta
pimentón
sal
perejil para decorar
Es muy fácil realizarla, simplemente debes coger una licuadora o procesador y poner los dientes de ajo, los garbanzos ya hervidos y bien tiernos, la pasta de sésamo (con dos o tres cucharadas bastará), el aceite de oliva y el zumo de limón.
Procede a realizar la pasta y que no te queden grumos. La consistencia debe ser como la de un puré, pero seguramente te quedará más cremosa por la influencia de la pasta de sésamo y el aceite de oliva.
Sobre el final condimenta con una pequeña pizca de comino (es demasiado aromático, ten cuidado con esto) y pimienta. Rectifica de sal y, por último, espolvorea con pimentón por encima, terminando con unas hojitas de perejil para decorar.
Es ideal para hacer unos buenos bocadillos con pan pita (vamos, pan árabe), tomate y perejil o para acompañar algunas comidas de carne orientales, como ser un cordero, o lo que tu imaginación demande. Sólo es cuestión de experimentar un poco.
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